Noticia publicada a las 01:35 am 17/04/25

Por: Rogelio Martínez Huerta.

“Se vive un panorama, doloroso, violento”
Víctor Sánchez, Arzobispo de Puebla…

La llegada al poder de López Obrador ha sido una odisea propia de alguna leyenda de la Grecia antigua. Porque la necedad, tozudez, fe inquebrantable y negociaciones ocultas al final tuvieron su premio. Entre sus funcionarios, no dejó fuera a la parte más oscura de la historia de México,

porque además sirven a los millones de adictos y de paso a quienes parten la droga para su distribución en los EE UU.
Los señalamientos de Donald Trump son esclarecedores, sin faltarles buenas dosis de hipocresía. Porque si bien los beneficiarios son quienes sufren y enfrentan diversas adicciones, los que ganan a más no poder son los grandes magnates del trasiego de enervantes que tienen un capital garantizado en las juventudes que llegan de ultramar bien acostumbrados a las fugas superficiales.
Lo grave está para el futuro, pagarán justos por pecadores y Trump quiere más prisioneros para hacer magnificentes chivos expiatorios. Con ellos justifica su gobierno desequilibrado, a la vez que gana haciendo grandes negocios en beneficio de la oligarquía estadunidense, mientras las adicciones se multiplican en todo el hemisferio.
La presidenta está sola, ella obedece tanto las instrucciones de Donald Trump por el lado norte, mientras le instruyen por el lado sur, de donde emanan las instrucciones de una búsqueda de equilibrio para llevar las cosas en paz.
En tanto, mientras pasa de la guerra arancelaria y amaina la tormenta de la primera guerra mundial comercial que ya asustó a toda Europa, orilló a negociaciones ocultas en oriente para que tanto China como Corea, Vientan y otros pueblos se sumen a una lucha en donde el gran derrotado será el capitalismo. Porque ya va perdiendo correligionarios que antes le defendían, al lado del alto Clero Papal internacional y el empresariado mundial, que sigue soñando en que la doctrina política más criminal de la historia del mundo no se afecta con cada movimiento de Donald Trump y Elon Musk.
El pueblo de México, ya resiente los primeros golpes de la recesión que cada día niegan los del gobierno cuatrotero. Tampoco aceptan que la inflación devasta las regiones pobres del país, porque a los economistas de Morena lo único que les preocupa, es seguir saqueando los erarios tanto Federales como Estatales y Municipales. Sin darse cuenta de que el próximo presidente no será de Morena, sino del partido Republicano, porque (uso y costumbre) serán los políticos de Estados Unidos, quienes decidirán lo qué se debe de hacer en un país con un gobierno protector del narco y cómplice de la corrupción en los gobiernos de los estados y municipios, donde el crimen organizado sentó su poder y no lo va a soltar fácilmente.
Usted leyente no se ponga nervioso, disfrute los “días santos” y beba, nade, juegue, cante, porque tal vez será el último año en que lo haga con alegría. Es cuanto…

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