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Para el Michoacano, al que le está ganando el ego, y asegura que el millón de votos que se logró en la pasada elección para Morena, fue por su carisma, su esfuerzo, chale, así de lanzado, cuál esfuerzo. Es más, se asume como un instrumento fundamental en esa victoria del partido guinda y aliados. Quiúboles, así o más arrogante. Y qué decir de la joya de declaración que hizo en la Ciudad de México, en visita a Palacio Nacional, minimizando la ola de violencia en la zona de Tierra Caliente, y las denuncias de extorsión que un día sí y el otro también sufren los productores limoneros por parte de la delincuencia organizada.
Y ahí le va la joya, dijo que en Michoacán todo está “bajo control, todo está estable, se han detenido varios objetivos criminales, sobre todo en temas de extorsión”.
La pregunta queridos lectores, es ¿qué estado gobierna Ramírez Bedolla?, es neta, para él todo está bajo control. Tal pareciera que la línea que dicta el inquilino de Palacio Nacional, es que minimicen los hechos de violencia, que resten importancias a las extorsiones, y sigan a pie puntillas la máxima del tabasqueño en materia de seguridad: “Abrazo, no balazos”.
Cómo estarán las cosas en ese estado que, hasta el dirigente de Morena en Michoacán, Juan Pablo Celis, ha denostado el trabajo del mandatario estatal, y hasta ya anda pensando en que sea mujer el próximo candidato de las guindas al gobierno estatal. Lamentable que Ramírez Bedolla se asuma como el mero, mero que garantizó los votos que obtuvo Morena, y deja de lado el liderazgo del presidente López Obrador, que durante el pasado proceso electoral fue el más eficaz coordinador de campaña de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum.
Bien haría Ramírez Bedolla, en reflexionar y tener una poquita de humildad, para reconocer que, sin el apoyo de López Obrador, nunca hubiera llegado a ser gobernador de Michoacán, entidad con una delincuencia está fuera de control y la inseguridad se ha convertido en el talón de Aquiles de su administración. La neta, la neta, la neta, Ramírez Bedolla le ha fallado a los michoacanos, pero su ego es mayor a los problemas de ese estado.
CHALCO
A más de 30 días del aguacero que inundó varias colonias de Chalco, Estado de México, sus habitantes ya no sienten lo duro, sino lo tupido, y les sigue lloviendo sobre mojado. Si bien los esfuerzos realizados por los tres niveles de gobierno han permitido que baje el agua, también han sido insuficientes porque la fuerte lluvia no ha parado.
Como una medida para apoyar a los damnificados de unas mil viviendas afectadas por la inundación, el gobierno municipal aprobó un presupuesto de 18.5 millones de pesos.
El alcalde José Miguel Gutiérrez Morales, destacó que se adquirirán y entregarán paquetes de electrodomésticos para las familias afectadas. Y para que no haya chanchullos y algunos vivales se quieran aprovechar de la situación, el presidente municipal dejo en claro que se levantará un censo, que estará coordinado por la Secretaría del Bienestar, para lo cual se instalarán módulos oficiales en las colonias afectadas, una vez que concluya el desalojo de agua.
La medida se determinó, luego que las autoridades estatales decidieron suspender el censo programado para este miércoles, mismo que servirá para contabilizar y cuantificar los daños y pérdidas materiales en las casas de las colonias Culturas de México, Jacalones, Tres Marías Nueva San Miguel y Emiliano Zapata.
Y poco empáticos, los habitantes de la colonia Covadonga, se opusieron a que la Comisión Nacional del Agua iniciará la obra emergente para dar una solución a la inundación que se vive en la zona cero.
Qué gacho nacho, están viendo y no ven, se pasan, se pasan. La obra anunciada por la secretaria de Gobernación Luis María Alcalde Luján, ándele, esa ternurita de funcionaria que rompió el protocolo en la entrega del Sexto Informe Presidencial en la Cámara de Diputados, llevaría las aguas residuales a la planta de bombeo ubicada a un costado del puente de Tlapacoya, que atraviesa la autopista México Puebla y las canalizaría a la caudal del río La Compañía.
Mientras tanto, decenas de familias han optado por rentar vivienda, rentas que se incrementaron considerablemente, con costos que val de los cinco a los diez mil pesos. Hombre, señores caseros no sean gandallas.
Fuente: Índice Político.
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