Noticia publicada a las 12:52 am 20/10/19

Por: Plácido Garza.
@PlacidoGarza

Ayer escuché al presidente de la Coparmex nacional declarar muy ufano que ese organismo no es un partido político
Exactamente el mismo día en que el Congreso de la Unión volvió ley la tipificación de delincuencia organizada contra los factureros, el presidente de Caintra NL, Adrián Sada Cueva se apersonó en la CDMX -quién sabe a dónde fue pero allá anduvo-

en un último y desesperado intento por frenarla en la Cámara de Diputados.
Lo mismo hicieron otros santones de la I.P. y los que no alcanzaron a hacer el viaje, desde sus reductos en todos los rincones del País, se dijeron agraviados y avasallados por la ley que combatirá a las factureras y empresas fantasmas, a cuyos representantes legales, dueños y socios se les dictará prisión preventiva oficiosa por considerarlos parte de la delincuencia organizada y un atentado a la seguridad nacional.
Les platico: ¿Saben ustedes cuántos diputados federales, locales o senadores son representantes de la empresa privada? Ni uno solo. Es más, en ningún cabildo de todos los municipios de México hay un solo empresario que haya llegado ahí jugando por algún partido, para defender los intereses de la I.P.
No hay ningún legislador abanderado por la I.P. mexicana como parte de un partido político, para hacerle contrapeso a la aplanadora de Morena, a los satélites del gobierno y a uno que otro -muy escaso- verdadero de oposición.
Esta ley y la de extinción de dominio, aplicadas al alimón, son demoledoras. Van a provocar una oleada de amparos, abandono de inversiones, estancamiento de la economía y fuga de capitales, de padre y señor nuestro.
No es que -como dijo el presidente- las cúpulas empresariales estén defendiendo a los EFOS y a los EDOS, sino que a los legisladores se les fue una pifia monumental: La calificación del agravante en contra de quien compra facturas a sabiendas de que su proveedor es un estafador y la salvedad para quien sin saberlo incurre en esa práctica.
Este solo argumento sería la diferencia entre considerar al mismo contribuyente como miembro de la delincuencia organizada y mandarlo al bote en forma oficiosa o tratarlo como a un actor en alguna de las muchísimas categorías que existen de evasión fiscal. La pena tendría que ser muy distinta para unos y otros.
Pero los legisladores agarraron parejo. Los diputados federales no le hicieron ninguna observación, no le quitaron ni pusieron ni una sola coma o un punto a lo que les enviaron los senadores y éstos se comieron enterita la iniciativa de ley que les mandaron desde el Palacio Nacional.
Y aquí es donde los empresarios mexicanos pecaron de inocentes, de omisos, de ingenuos, de tarugos o de otro epíteto más impronunciable, porque ¿qué ganan ahora al rasgarse las vestiduras diciendo que esta ley se está fregando por igual a los malos, a los regulares y a los buenos contribuyentes?
Ayer escuché al presidente de la Coparmex nacional declarar muy ufano que ese organismo no es un partido político, en un intento por salirle al paso a la acusación directita que les lanzó López Obrador respecto a que su oposición a dicha ley es porque están defendiendo a los delincuentes, criminales y evasores fiscales.
Gustavo de Hoyos Walther le mandó decir textualmente al inquilino del Palacio Nacional “que no se confunda y que no mienta, porque Coparmex es una institución que tiene 90 años impulsando la responsabilidad social empresarial y que siempre ha sido apartidista”.
Estimado Gustavo, ese es el problema, que ustedes en la I.P. tienen satanizados a los partidos políticos y por eso no han querido meter entre sus filas a empresarios que hagan campañas, que las ganen y se sienten en las curules de los congresos locales, del federal y del senado, para defender desde esas tribunas los intereses que ahora dicen que les han pisoteado con estas dos leyes.
El presidente de Coparmex no es el único empresario que no quiere mezclarse con la chusma de los partidos políticos. Ellos -en las juntas de consejo de sus empresas y de sus camarotas- se sienten agraviados cuando se les sugiere que metan gente a los partidos para que cabildeen desde adentro del Senado y el Congreso de la Unión.
Muchos de ellos se sienten químicamente puros como para inmiscuirse en esa política mexicana tan vilipendiada por mexicanos y extranjeros.
Señores de la I.P., si quieren que leyes así no pasen, van a tener que volverse políticos, porque desde afuera ya se vio que con este presidente, de plano, no pueden.

CAJÓN DE SASTRE
Los empresarios están llorando hoy como niños, lo que no supieron defender como hombres.
PD Feliz cumpleaños, Rodrigo, donde quiera que te encuentres.
placido.garza@gmail.com
PLÁCIDO GARZA. Nominado a los Premios 2019 “Maria Moors Cabot” de la Universidad de Columbia de NY; “Sociedad Interamericana de Prensa” y “Nacional de Periodismo”. Forma parte de los Consejos de Administración de varias corporaciones. Exporta información a empresas y gobiernos de varios países. Escribe para prensa y TV. Maestro de distinguidos comunicadores en el ITESM, la U-ERRE y universidades extranjeras. Como montañista ha conquistado las cumbres más altas de América.

Fuente: Sdpnoticias.com

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