Noticia publicada a las 03:41 am 27/11/25

Por: Rogelio Martínez Huerta.

AMLO, buscó el poder hasta que con “apoyo” de las “Fuerzas del mal”, llegó y asevera que, no lo bajará ninguno de sus adversarios, porque las vibras chamánicas, la santería africana y los talismanes de Catemaco lo protegen de las envidias, el mal de ojo y los muñecos de trapo, atormentados por los piquetes de agujas que hacen el placer de sus adversarios,

que no saben por dónde entrarle para acabar con un poder que emergió de las “sombras” e influir en un gobierno que puso a disposición de las fuerzas más oscuras del mal, con tanto muerto por covid, tanto desaparecido sin faltar la enorme cantidad de asesinados que superó con creces a los de Calderón y de Peña Nieto.
Para hacer más sólida su fuerza enigmática y con ello impedir que las envidias le lleguen, se fortificó con un “cinturón de damas” que, con su energía vital le protegen de los conjuros de los magos negros que amenazan desde las sombras a su desgobierno, a su dinastía cuatrotera sin faltar al gabinete de facinerosos que lo rodea, lo obedece como a un hierofante místico y para poner en el horizonte su simpatía se presta a circular su nuevo “libro” que, realizado por uno de sus “negros” predilectos ha terminado para pasearlo por veinticuatro Estados que son desgobernados, saqueados y burlados por sus gobers místicos que obedecen ciegamente los conjuros del Sadgurú de Macuspana. Sin dejar de pensar que, el libro de marras, puede servirles a sus admiradores como una nueva Biblia para que, leyendo los versículos más cachondos, ilumine los caminos de tanto obnubilado por los apoyos que viniendo de sí mismos no alcanzan a ver que el gurú de Palenque los agarró de pendejos y ni cuenta se han dado.
No faltará en el inicio de su nuevo periplo por los campos yermos del México cuatrotero, una tirada de cartas para leer su futuro, obedeciendo la recomendación de que, la carta del Rey de Espadas la lleve junto al corazón para evitar los ataques de sus enemigos que buscarán asesinarlo picándole los ojos principalmente en Puebla, que es donde enterraron un muñeco parecido al Peje, vestido de un traje gris perla, tirándole a robalo, sin faltar por si las dudas la Marina, la Defensa y la guardia Nacional. Que, de antemano los servicios de inteligencia, habrán llegado desde semanas antes para “peinar” la zona por donde pase emulando a cristo que, rodado de sus apóstoles, llevará la magia de su imposición de manos, bendiciones mil por los senderos conocidos. resucitando de paso dos que tres muertos olvidados.
A la par de estos hechos, nadie se da cuenta de que Claudia la “pequeña saltamontes”, comete errores al por mayor, imaginando que la bendición de su Gurú la protegerá por siempre de las maldiciones del pato naranja, ahora amenazado por tanto acoso sexual que prodigó, cuando era el coordinador del concurso Miss Universo y era feliz con su grupo de enfermos sexuales, envejecidos entre tanto calor de niñas púberes o niños calenturientos de quince años.
Cuando todo se pone en ristre para salir a enfrentar molinos de viento, don Pejote el caballero de la pinche figura, sueña, imagina, goza a cielo abierto; su gobierno se extenderá por siete generaciones. Llevando al poder a uno por uno de sus hijos que, sostenidos por el gabinete que rodea a la alumna predilecta; él gurú macuspano y palenquero vibra, ¿Quién dice que no puede volver? Al fin y al cabo, todo lo que necesita es elevar la calidad de los enervantes que tanto requiere Donald Trump para sus cuarenta y cinco millones de adictos y todos serán felices.
De eso se trata y el camino es ancho, pero ahora adornado con banderitas guindas que Rosa Icela, María Luisa Alcalde Lujan, la Sra. Vivanco con su Hijita Claudia Rivera y otras generosas damas las pondrán, le echarán confeti y serpentinas al nuevo santo de palo que paseará, soñando en los tumultos del 2018, como si fuera ayer. Lo grave está en que ese ayer no volverá, porque todo se ha descompuesto, crecieron los enemigos y hay adversarios de muchos colores, en especial los que portan los tintes del color del dólar que son y serán permanente amenaza. Es cuanto…

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