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La importancia de no tener miedo y de no dejarse amedrentar…
Noticia publicada a
las 01:46 am 23/04/19
Por: Félix Sautié Mederos.
¡Dichosos si sufren por causa de la justicia! «No teman lo que ellos temen, ni se dejen asustar.»
(1, Pedro, 3,4)
Queridos lectores de Crónicas Cubanas, en la tradición cristiana en que me formé desde muy joven y que he tratado y trato de vivir durante toda mi vida lo más auténticamente que me ha sido siempre posible, conforme a mis fuerzas, mi salud y mi voluntad de vencer,
la Pascua de Resurrección que se celebra a partir de los domingos de Resurrección es la festividad litúrgica más importante de todos los cristianos a nivel mundial. Cada Pascua de Resurrección los cristianos, especialmente los católicos, nos felicitamos mutuamente porque en nuestra Pascua se conmemora el más importante hecho de la Historia según nuestra concepción: la Resurrección de Jesús de Nazaret y su triunfo sobre la muerte y la ignominia con el amor como esencia y práctica de vida. Lo que constituye la piedra angular sobre la que se erigen nuestra filosofía, nuestra teología y, en definitiva, las esencias de todo por lo cual rogamos y luchamos durante nuestro peregrinaje terrenal. En esto, no dejo de reconocer que hay quienes sólo se manifiestan y se guían por lo externo de las palabras, mientras que anidan en sus corazones el desprecio por los demás y sus intereses de explotación que, en definitiva, dividen al mundo en clases sociales que se mantienen en un contrapunteo permanente. Algunos de ellos forman parte de los sepulcros blanqueados y de las razas de víbora que Jesús de Nazaret denunció en su Evangelio.
Precisamente Francisco, en su homilía en San Pedro durante los oficios adelantados del domingo de Resurrección que da inicio a la Pascua de los cristianos, expresó un dramático llamado universal en favor de que los seres humanos superen el miedo, la cerrazón y la desolación, elementos que acaban con la esperanza.
También expresó algo que debería golpear con muchas fuerzas a nuestras conciencias en estos momentos: “A menudo, la esperanza se ve obstaculizada por la piedra de la desconfianza. Cuando se afianza la idea de que todo va mal y de que, en el peor de los casos, no termina nunca, llegamos a creer con resignación que la muerte es más fuerte que la vida y nos convertimos en personas cínicas y burlonas, portadoras de un nocivo desaliento”
Desde los albores de nuestras creencias en el Dios Trino y Único, se recoge un mensaje del Profeta Isaías que dice textualmente y cito: Así que no temas porque yo estoy contigo; no te angusties porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra victoriosa. (Isaías 41:10)
El llamado de NO TENGAN MIEDO fue planteado con especial fuerza por San Juan Pablo II durante su histórica visita a Cuba en 1998.
Especialmente en mi criterio para los cubanos, No Tener Miedo ha sido y es lo esencial de nuestro enfrentamiento que desde hace 150 años hemos presentando ante los imperialismos que han tratado de esclavizarnos, primero el colonialismo español y posteriormente el imperialismo del Norte Revuelto y Brutal que nos desprecia.
En este año 2019, durante los días de la Semana Santa y de la Pascua Cristiana, se han intensificado las amenazas de sumisión, sufrimientos y muerte sobre nuestra pequeña nación, de las cuales no estamos exentos ninguno de los cubanos y cubanas, estemos dentro o fuera del país. Esto deberían comprenderlo muy especialmente los que no se sientan amenazados, los que vilmente acompañan esas amenazas y los que se sientan cansados. Las amenazas son de odios y desprecio contra todos los que seamos cubanos, latinoamericanos o pobres del mundo, y que no formemos parte de las clases en que se agrupan los poderosos de la Tierra. Sólo hay que leer con detenimiento lo que plantean al respecto Mr. Trump y sus acólitos de adentro y de fuera de los Estados Unidos.
No tener MIEDO y la UNIDAD, por sobre todas las cosas, son nuestras armas salvadoras en un combate que no quedará más remedio que asumirlo con todo lo que tenemos, como lo hemos estado asumiendo desde 1868 a la fecha, con la consigna planteada por Fidel de que “Ellos hoy hubieran sido como nosotros, nosotros entonces hubiéramos sido como ellos”, con lo cual nos dio una orden para siempre de combatir sin descansos y sin miedos mientras que el Imperialismo esté vigente en el mundo. Fue con esa actitud y cumplimiento de esa orden de combate que Fidel nos planteó con su ejemplo por delante que vencimos en la Invasión por Playa Girón hace 58 años y que siempre podremos vencer si lo hacemos la fuerza y la dinámica de nuestras vidas revolucionarias.