Noticia publicada a las 02:20 am 18/08/18

Por: Rogelio Martínez Huerta.

Cada día que pasa es más difícil encontrar alguna nota que valga la pena sobre los rebeldes izquierdosos que exigen la anulación de los comicios del 1o. de julio en que fueron vencidos por el Frente Por Puebla y que pese a su caótica serie de infundios es más lo que se hunden que lo que avanzan ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
La causa es bien conocida. El INE encontró un “chicaneo” perverso con el que intentaron verles la cara de bobos a los funcionarios electorales.

Para colmo de graves consecuencias, hallaron que el “rebelde” número uno de apellido Barbosa, no acreditó gastos de más de 10 millones de pesos y que el Financiero balconeó ante la opinión publicada. Lo que para justificarse hizo exclamar al “austero” Barbosa (a decir del “austero” número 2 JJ Espinoza” que lo que acontecía es que no me quieren (¿).
No creo que tanta locura disfrazada de política sea válida para justificar el intrínseco deseo de “negociar” en lo oscurito su inconformidad bastante comprable. Y más, cuando los inconformes siempre han vivido del erario Estatal y hasta del federal que es lo que los encumbró como felices poseedores de riquezas injustificables y propiedades innumerables.
Lo grave es que, tantos seguidores caerán en la más espantosa frustración, cuando se den cuenta de que andan siguiendo ídolos con pies de barro que han descendido de la gracia del Presidente Electo que ya tiene toda la información respectiva de sus ruines hojas de servicios políticos a diversos postores en su asqueroso pasado.
Ahora solo falta encuerar a quién les paga la aventura de su campaña de inconformidades, y que en cuanto se descubra dejarán de tener foros tanto en radio, como en presa escrita e incluso hasta en la televisión poblana. Porque con mentiras ya sorprendieron a Ciro Gómez Leyva y a Carmen Aristegui que no tienen reporteros que investiguen profesionalmente las riquezas de Barbosa y del JJ Espinoza, para que se den cuenta de que les dieron los micrófonos a políticos trapecistas y arribistas de la peor ralea.
Dice un viejo dicho que: “El que no conoce a dios ante cualquier santo se anda hincando” y eso sucede con los cada día menos seguidores del “austero” millonario de Tehuacán C. Miguel Barbosa a quien ya no le creen sus repetitivas “histerias” de terror con sus diversas variedades de amenazas que solo engañan a los pendejos quienes por falta de experiencia política le obedecen sus imbecilidades cada día más reiterativas.
A una de las últimas reuniones acudió un médico y me comentó que veían graves deslices en los discursos del “austero” “rebelde” que fue derrotado por haber dividido a Morena como primer paso de su proyecto político. Yo le comenté que no solo anda más de los nervios, sino que cada día se notan sus graves trastornos psicológicos por desniveles de glucosa. Coincidimos y dejamos para la historia de la entidad “lo que no se debe de hacer en política”. Porque esa es y será la enseñanza que han dejado los ambiciosos que se filtraron como advenedizos en Morena. Lo bueno es que AMLO ya lo sabe y lo demás es historia… Vale.

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