Noticia publicada a las 03:52 am 19/10/17

Por: Rogelio Martínez Huerta.

Si el PRIAN vuelve a encaramarse al poder, su estilo de gobernar será el mismo de siempre. Es decir, van a saquear, a robar, a manipular las cifras del erario con la ayuda mítica de los medios alquilados por su gobierno y por lógica, el hambre, la miseria y las enfermedades endémicas se van a multiplicar como se ha visto en otras partes del mundo, donde campean políticos rateros similares a estos que sufre el pueblo mexicano.

Hace unos días visitó México, el premio nobel de economía Dr. Paul Krugman. Según el ponente, de ganar AMLO las elecciones del 2018, las empresas consolidadas en México no tendrían pánico, pero todas aquellas que son nuevas, tendrán resistencias y su fama de populista afectará la relación entre Estados Unidos y México. Esto porque con anterioridad el líder del Movimiento de Regeneración Nacional, comentó que de llegar al gobierno echaría para atrás las reformas aprobadas por Peña Nieto y Calderón. Esto sin discusión le daría beneficio al pueblo mexicano.
En el marco de un simposio organizado por The New York Times en el Museo Rufino Tamayo, el profesor de Princeton, disertó sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y específicamente dijo que no es lo que prometió, es decir, se quedó corto en generar más crecimiento económico y desarrollo para México.
Lo que el Nobel de economía pasó por alto fue que, el TLC impulsado por Salinas solo dio buenos frutos y magnificentes ganancias a muy pocos empresarios, pues lo que México vendió fue mano de obra barata, Algunas legumbres, piezas de autos y me quedo corto en cuanto a los beneficios, porque se enriquecieron unos cuantos magnates, quedando en la vil miseria los trabajadores blancos de Estados Unidos y los que aquí trabajaron con pésimos salarios.
La posibilidad de que AMLO quede en el poder está bien cimentada en la descarada corrupción que mantiene a Peña Nieto y sus vándalos administrativos en el poder, donde con todo el cinismo del mundo, manipulan a placer todas las posibilidades de que MORENA No gane limpiamente las elecciones del 2018.
La mafia del fraude electoral se empieza a mover en todos los estados con la apertura de la complicidad que implica repartirse un botín gigantesco. Pero el hambre del pueblo no será fácilmente abatible con discursos, publicidad y mentiras disfrazadas de política electorera.
Por lo mientras, Peña Nieto y los gobernadores de los Estados donde hubo más damnificados por los sismos, se arrojan unos a otros las responsabilidades del manejo de los fondos para la reconstrucción y no se ve el dinero y mucho menos los apoyos que llegaron del exterior, porque como siempre, probable es que ya les hayan hincado el diente como sucedió en el régimen de Miguel de la Madrid cuando se robaron todo lo que pudieron.
Hace mucha falta que la organización de la base popular se manifieste en la sociedad para enseñarla a organizarse. Pero no para las elecciones fraudulentas que se avecinan, sino para que se defiendan del hambre y la miseria, que en el 2018 a partir de marzo asolará las familias mexicanas y para lo que no habrá presupuesto que alcance para dar de comer a tanta gente con tanta necesidad. Lo veremos…

[Regresar a la página principal]